La versión en español se tituló Gótico, sin embargo profesamos mayor admiración por el título en inglés, Mexican Gothic. Nos referimos a la exitosa novela de Silvia Moreno-García, la cual ha recibido muy favorables críticas y que aquí en Nación Libro hemos tenido el agrado de reseñar en el pasado.
Ahora nos referimos a la nueva novela de Silvia, una adaptación del clásico de H.G. Wells La isla del Doctor Moreau pero en este caso la trama está ambientada en un pueblo de nombre Yaxaktun, en la península mexicana de Yucatán.
El inefable doctor continúa sus experimentos científicos de vivisección mediante los cuales crea híbridos, seres mitad humano y mitad bestia, con el fin de crear peones al mando de Hernando Lizalde, acaudalado dueño de cuantiosas propiedades en la región.
Pero dichos experimentos no solo carecen de todo tipo de recato ético, sino además quedan lejanamente cortos de ser exitosos resultando en organismos con monstruosas deformidades. Excepto… excepto la más gloriosa creación del Doctor Moreau, su propia hija, la bella Carlota.
Ante la frustración de no poder complacer a su benefactor con los resultados esperados de sus investigaciones, el Doctor Moreau y Carlota enfrentan diversos conflictos los cuales se agravan ante la visita de Eduardo Lizalde, el hijo de Hernando, y de su primo Isidro.
El primero cae rendido inmediatamente ante la belleza de Carlota, a quien a la postre corteja; el segundo cuestiona la infructuosa inversión de su tío y propone medidas drásticas las cuales impactan seriamente el día a día de la hacienda de los Moreau.
Tal como ocurre en la novela de Wells, entra en también en acción un personaje de nombre Montgomery quien funge aquí como el mayordomo de los Moreau. Montgomery es un trabajador británico venido a menos por causa de su alcoholismo y de sus deudas, pero en los momentos críticos da la cara por el Doctor Moreau, por Carlota y por los híbridos quienes llegan a ser sometidos por causa de intereses mezquinos.
Surge así una intensa guerra de poder y de pasiones cuyo relato mantiene en vilo al lector, lectura por demás recomendable. ¡Disfrútala también!
Ernesto Martínez
Presidente de la Nación Libro